Este es el encabezamiento dé escrito, no se bien, dirigido a quien o quienes......, donde hace un resumen de situación, respecto a los hechos en que se ve envuelto por el año 1.991, el escrito es de 27 años después es decir 2018.
Pero bueno, todo empieza con "La red de expoliadores arqueológicos"
Muy interesante , en Cartas al Director, del Diario de Cádiz, es escrito de Doña Celia Lería Ruiz, el 2/2/92
"Una vida dedicada a la arqueología"
"He leído con indignación el articulo publicado el día 3 de enero en primera pagina y donde se dice entre otras cosas refiriéndose a mi hijo Adolfo Bosch que está acusado de "expoliar piezas arqueológicas".
Según el Diccionario de la Lengua Española, expoliar significa "despojar con violencia o iniquidad". Creo que es difícil encontrar una palabra menos adecuada para designar la labor de una persona que exponiendo su vida y su salud (hoy bastante deteriorada) de una forma desinteresada, ha reunido un tesoro que a no ser por el ( a sus excepcionales aptitudes) se hubiera perdido irreversiblemente, pues en muchos casos las piezas han sido recogidas en vertederos o en lugares a punto de pasar la draga.
Hay algunas piezas que entregó en distintas ocasiones a algunos estamentos oficiales y ahora cuando preguntan por ellas, nadie sabe dónde están. ¿Dónde estaría este tesoro si lo hubiera indo entregando.?
Es paradójico que se pretenda calificar de expoliador a una persona que ha dedicado la vida a la Arqueología, que trata a cada pieza con todo cariños. Viejo conocido de todos los arqueólogos con los cuales ha colaborado con frecuencia, participante en congresos de Arqueología y presente siempre en todo tipo de foros, conferencias, etc., relacionadas con el tema.
La ilusión de su vida es entregar las piezas para hacer un museo en su pueblo natal, San Fernando. Durante un año entero mantuvo conversaciones con el municipio isleño, él sólo pedía seguir colaborando en el engrandecimiento del mismo, ¡ esas piezas son toda su vida !
La cuestión se malogró por no sé qué intereses políticos y además, ¿no influiría la envidia de que en un pueblo como San Fernando hubiera un gran museo con piezas mejores que en el Museo Provincial? ¡Y además organizado por un solo hombre!
Un poco desilusionado lo propuso en Puerto Real, por lo menos se quedaría en la Bahía y además allí hay un alcalde capaz de vencer los imponderables de la política. La incautación de las piezas que había entregado para una exposición en esta ciudad se llevó a cabo tal vez "casualmente" aprovechando la ausencia del alcalde titular.
Me interesa resaltar que la mayoría de colecciones particulares u oficiales e incluso museos locales tienen sus piezas sin catalogar por el Patrimonio y por tanto Están cometiendo el mismo "delito" que se le atribuye a mi hijo.
¿Por qué no se confiscan estas piezas? ¿Aquí no se acusa a nadie de incautación de bienes del patrimonio?
Me gustaría decir muchas más cosas pero prefiero terminar ya diciendo qué haré todo lo humanamente posible para que a mi hijo no lo utilicen de chivo expiatorio ni para que nadie se cuelgue medallas a sus costa.
Tengo la tranquilidad de contar para ello con el apoyo de muchísimas personas que espontáneamente vienen o llaman por teléfono dándole a Fofi apoyo y ofreciéndose para lo que necesite, no en vano es u n hombre bueno y amigo de todos
Celia Lería Ruiz
San Fernando "
No realizaré ningún comentario, y menos a la carta de una madre, ustedes que leen esto, sacarán conclusiones, pero si es verdad, que dice cosas muy verdaderas.
Curiosa también una "Carta al Director", en el mismo periódico, pero más de un año después el 25/06/93.
Firmada por Olga Vallespín Gómez, a quien Fofi, ayudó, colaborando con ella.
"La Colección de Fofi"
"Las cosas hay que analizarlas despacio para llegar a conclusiones. Me refiero a la colección Fofi, que permanecen todavía embalada en el Museo de Cádiz, aún después de que el juez sobreseyera la causa que la Delegación de Cultura inició en su contra y motivó el traslado. Dejando aparte consideraciones judiciales, si, tal como articula la Ley de Patrimonio de 1985, el fin principal de la misma es proteger los bienes históricos para conservación en el futuro y que puedan ser contemplados por la mayor cantidad de personas, la solución actual no es coherente.
En primer lugar, es más que dudoso que las condiciones en que se encuentran sean las más adecuadas y garanticen su conservación, tanto por el hecho de permanecer embaladas como por no haber recibido ningún examen por parte de una especialista en Restauración, que hubiese permitido tratar los materiales de acuerdo con él para evitar su deterioro.
En segundo lugar, porque tal como están desde hace más de un año y medio no pueden se contemplados por nadie, a no ser por el personal de Cultura. Independientemente de quien sea la propiedad de los objetos, creo que lo que hay que defender es su protección y conservación, así como una adecuada exposición al público y posibilidad de estudio.
San Fernando estaría orgulloso de cumplir la función y tiene los medios para ello, Públicamente se ha manifestado que Fofi ha mantenido gestiones a tal fin y se han ofrecido locales adecuados, tanto por parte del Ayuntamiento como del Museo Naval. No se entiende entonces por qué se incumple la sentencia del juez y se mantiene esta absurda situación. Las autoridades de Cultura deberían reconsiderar su postura y obrar en beneficio de todos, con verdadera voluntad de proteger el Patrimonio, devolviendo la colección en vez de mantenerla oculta. En titulares de este Diario , el señor Saucedo, delegado de Cultura, hace tan solo unos días se presentaba, cumpliendo con su deber por otra parte, como defensor del patrimonio. Por lo tanto creo que podemos confiar en su buen hacer y poder ver pronto la coleccion en San Fernando.
Olga Vellespín Gómez
Madrid "
Me volverán a permitir, que no comente el escrito, sólo decir que también esta lleno de verdades. Aparece nuevamente el Sr. Saucedo y la Delegación de Cultura.
Al día de hoy febrero de 2020, aún no se ha resuelto nada.
Veremos cómo se desarrollaron los hechos, paso a paso.....